MAUS: RELATO DE UN SUPERVIVIENTE.
- behind the wall
- 29 ene 2017
- 2 Min. de lectura

Aún está extendida la creencia de que la novela gráfica tiene un aura infantil; más que nada porque la aparición de comics dirigidos al público adulto es muy reciente. Asimismo, mucha gente todavía piensa que es muy difícil transmitir conceptos profundos usando el cómic, que solo sería “útil” para ideas simples.
Este cómic, publicado originalmente por episodios a finales de los años 70, da una bofetada en la boca a todos aquellos “estudiosos” que atacan al comic como género “superficial”. El cómic narra la vida real del padre del autor, Art Spiegelman, judío polaco superviviente del holocausto, así como el proceso de entrevistas que el propio Spiegelman tuvo con él; recurriendo en numerosas ocasiones a saltos temporales para cambiar entre su relación personal y su relato, incluyendo el asesinato de gran parte de su familia y su traslado a diversos campos de concentración.
Una de las grandes innovaciones de esta obra es su gran simbolismo. Para acentuar la importancia que la etnia tuvo durante el holocausto, Spiegelman retrata a cada grupo étnico como si fuera una raza animal diferente: Los judíos son representados como ratones, los alemanes como gatos, los polacos como cerdos, los estadounidenses como perros…
De ésta manera, el cómic muestra muy bien como se deshumanizó a la gente en la Europa ocupada por los nazis, reduciéndolo todo a la simple pertenencia a una etnia determinada. El simbolismo de ésta separación por especies es tan extrema que cuando el protagonista se hace pasar por polaco, se lo retrata como un ratón con una careta de cerdo.
Otra de las innovaciones que hace el cómic se da en el idioma. Para mostrar que su padre no habla correctamente el inglés, escribe los tiempos verbales mal de forma intencionada; por cierto, la traducción española respeta ese rasgo de una forma muy creíble.
En resumen: Maus es una obra totalmente recomendable para cualquier persona interesada en la historia del holocausto. Recordad que es muy duro. No apto para menores de 18 años.
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